jueves, 20 de febrero de 2014

'THE MONUMENTS MEN' NO ES MONUMENTAL, PERO ES UN BUEN HOMENAJE


Si leéis las criticas que hay por ahí de esta película quizás os lo penséis dos veces antes de ir al cine, pero yo voy a romper una lanza a favor de este film, y si de verdad os apetece verla porque el trailer o el argumento os ha llamado la atención lo suficiente como para gastaros los cuartos en esta película (o esperar una lenta descarga, eh pillines) yo os animo a que lo hagáis. Primero como historiadora del arte que soy, luego como museologa (si esa profesión existe) por último como amante del cine, y del cine que entretiene, esta película cumple con tal cometido, con una mezcla de sentido del humor, drama en justa medida, ciertas dosis de edulcorante, pero justificadas y alguna que otra lección de arte y cultura, que no vienen mal de vez en cuando.

Por supuesto no falta el siempre excesivo heroísmo americano, y un trasfondo moral y reivindicativo que se ha hecho ya marca de la casa en las cintas dirigidas por un George Clooney que no veo que termine de consolidarse como gran director -pero va en camino- 

La película trata un episodio real acontecido a finales de la II Guerra Mundial, y aunque es bastante conocido, suele ser uno de esos puntos de la historia que caen en el olvido hasta que se produce algún tipo de conmemoración o alguien lo lleva al cine. Como decía a finales de la II Guerra Mundial, un selecto grupo de historiadores, conservadores y expertos en arte, tanto americanos como británicos, van a llevar a cabo una importante y peligrosa misión: recuperar las obras de arte robadas por los nazis durante la guerra y devolverlas a sus legítimos propietarios. Misión difícil, ya que las obras estaban bien custodiadas y el ejercito alemán tenia orden de destruirlas si la guerra no terminaba a su favor. En una carrera a contrarreloj estos amantes del arte y la cultura arriesgaron sus vidas en esta misión sin precedentes para evitar la destrucción de grandes tesoros de la humanidad. 

Puede parecer un poco cínico el argumento, y esa lucha tremenda contra el expolio llevado a cabo por los nazis, cuando todos sabemos que americanos, británicos y franceses han llevado a cabo los mayores expolios en la historia del arte, pero eso fue antes de que por fin algunos y verdaderos amantes de la cultura se reunieran para promulgar leyes que protegieran al arte y la cultura en su país de origen y quizá estos hombres fueron los que sentaron ese precedente. No voy a daros lección de historia, ni de leyes patrimoniales, pero al menos os doy un punto de vista distinto al que dan los críticos. Y podréis estar o no de acuerdo, eso ya lo dejo a la interpretación de cada uno.

Retomando el hilo propiamente cinefilo tengo que poner la atención sobre el elenco de actores, formidables, mi único pero era Bill Murray, al que nunca he tenido como actor serio y no me terminaba de encajar de en la historia, hasta que vi la película y me sorprendió gratamente. Como siempre genial John Goodman, al que me alegro de ver de nuevo en activo en la gran pantalla. Bob Balaban cierra este conjunto de actores veteranos poniendo el punto más entrañable de todos. Formidable actuación.
No están nada mal un extrañamente maduro Matt Damon, un autentico desconocido para mi en el cine sonoro Jean Dujardin ('The Artist' 2011) pero que está bastante correcto en su papel. Un George Clooney que además de dirigir protagoniza esta cinta, muy correcto en su papel de intelectual profesor y aparcando su fama de seductor.
Mención aparte, para una Cate Blanchett que nunca defrauda, soberbia en su interpretación y que este año es firme candidata a llevarse un oscar a casa por otro trabajo como actriz protagonista en 'Blue Jasmine'(2014).

En cuanto a la ambientación y la recreación histórica el film esta de diez, formidable trabajo. Gran trabajo también el de la iluminación, ha sido uno de los detalles técnicos que más me han gustado. Ofrecía escenas muy plásticas, muy artísticas, sobre todo cuando recurre a escenas con una luz muy puntual sobre los actores o algunas de las piezas que vemos. Una delicia. La fotografía sin duda buena, nada especial, pero la iluminación parece mejorarla. 
La banda sonora no es de las que sobresalen pero apoya con agradeble resultado la narración. Narración con ritmo nada lento, y que mantiene al espectador atento a la pantalla.

En definitiva una película que bajo mi punto de vista merece la pena ver. Para pasar un buen rato en el cine (o en casa) con justas dosis de drama y comedia, así como de acción. Y para mi lo más importante el bonito homenaje que se hace a esos hombres que lucharon por amor al arte y a la cultura, y porque no decirlo, homenaje a los hombres y mujeres que hoy día siguen haciéndolo.


lunes, 17 de febrero de 2014

'LA LADRONA DE LIBROS' LA INOCENCIA Y LA GUERRA


Antes que nada he de decir que no he leído la novela en la que se basa está película, por lo tanto no puedo valorar la fidelidad con el texto original, pero lo que si puedo decir que es una tierna visión de una dura y angustiosa realidad.

La Segunda Guerra Mundial es un tema que como ya he comentado en otras ocasiones me fascina, por lo que tenia grandes expectativas sobre esta película en base a una visión diferente. Lo es, sin lugar a dudas y desde luego me ha dejado muy buen sabor de boca, pero quizá se le podría haber sacado más partido a la historia, como desconozco el contenido de la novela, no se si el error será de quienes han adaptado el guión o del autor original que ofrece una idea, quizá demasiado edulcorada de un singular episodio del régimen nazi, como fue la quema indiscriminada de fundamentos culturales como los libros.

Sea como sea, no quiero poner puntos negativos sobre este film porque no los merece. No me ha fascinado, pero desde luego me mantuvo atenta a la pantalla desde el primer minuto. La cinta nos propone una visión de esta época entre los años 30 y 40 desde el punto de vista de la inocencia y la ternura de los niños, niños que de la noche a la mañana se vieron envueltos en un laberinto de situaciones descontroladas, altamente peligrosas, pero que de las que estaban totalmente ajenos a todo conocimiento directo y que por manos del destino poco a poco y sin que prácticamente nadie les diga nada van haciendo sus propias averiguaciones.
Precisamente esto es lo que fundamentalmente nos va presentar esta película, una joven Liesel cuya madre es comunista, que se ve obligada a vivir con una familia adoptiva. Una joven que tiene curiosidades, incertidumbres que de pronto parecen verse frenadas por la irracional situación del régimen nazi en Alemania.
Como digo, aunque la película me ha resultado demasiado tierna y dulce, creo que no es reprochable en absoluto, puesto que la vemos desde el punto de vista de unos niños. Niños con los que vamos a empatizar, porque a pesar de las dificultades que el entorno les plantean, ellos siguen portándose como niños, juegan en la calle, y viven escenas de lo más cotidianas en casa, pero también vamos a deleitarnos con esa rabia y esa necesidad de lucha contra impuesto, el ansia de libertad que engranan a la perfección con las citadas escenas de cotidianidad.

Punto muy a favor es la actuación del elenco principal, la joven Sophie Nélisse excelente en su papel, y creo que se la debería tener muy en cuenta para el futuro. Esta jovencita tiene mucho que demostrar todavía como actriz. Genial, formidable, magnifico Geoffrey Rush en el papel de padre cariñoso. No se queda atrás Emily Watson que borda su papel. Sumamos a esto una excelente y muy bien cuidada ambientación, remarcada por un excelente trabajo de vestuario y peluquería. Y para ponerle la guinda al pastel una delicada, y maravillosa banda sonora de manos John Williams, puede que no sea una de esas bandas sonoras que quedan para el recuerdo, y quizá no sea la mejor que ha compuesto este gran compositor, pero sin lugar a dudas es muy buena.
El ritmo narrativo he de decir que para mi gusto personal es demasiado lento, pero teniendo en cuenta que lo que nos presenta es un drama familiar tal vez sea hasta lógico, a pesar de todo, me mantuvo bien atenta a casa secuencia. Un ritmo mayor probablemente habría sido fallido, no hay acción que requiera mayor velocidad. Contextualiza un drama familiar en una difícil época, en medio del caos que precede y sigue al inicio de una guerra, y ante tanto caos se ha sabido poner un punto de cierta felicidad, que nos saca la sonrisa. Pero en la que no falta la lágrima. El amor, la amistad, la lucha por vivir y la libertad narrados por un siniestro personaje al que oímos y no vemos, pero que nos ofrece el mundo desde el punto de vista de la inocencia de una niña.

Desde aquí aprovecho para recomendarla, sobre todo a aquellos que os soléis guiar por mis comentarios, si realmente queréis ir al cine a ver una película que os deje bien satisfechos de cine no esperéis más y dejad que 'La ladrona de libros' os robe toda vuestra atención.

Aprovecho también para hacer una ligera protesta, quizá esta no sea la mejor de las películas que hayan hecho este año para la temporada de premios, pero merecía más de una nominación, especialmente en cuanto a interpretaciones y a diseño, y vestuario. Solo ha sido nominada por la banda sonora, que está muy bien, pero no es suficiente.


miércoles, 5 de febrero de 2014

'LA GRAN ESTAFA AMERICANA': LA GRAN ESTAFA DE DAVID O. RUSELL


Pues si que eligieron bien el titulo en esta ocasión, porque la película ha resultado ser ser una autentica estafa. Sí, haber me explico, resulta que vas al cine con altas expectativas sobre una lo que parece ser una de las mejores películas del año y lo que te encuentras es una decepción fuera de lo común.

Sinceramente no salgo de mi asombro, con un plantel de actores de la categoría de los que aparecen en el largometraje no entiendo como se consigue desaprovechar tanto talento. El guión no llega a despegar nunca, la historia en sí apunta bien, pero el desarrollo de la misma es tedioso, demasiado lineal y con poco ritmo ascendente, por no decir ninguno. No hay nada que excitante que te mantenga con el alma en vilo o despierte algún tipo de emoción, le falta energía -se me hizo eterna- Y tengo que decir que me resulta una verdadera lástima que haya sido así, porque prometía y mucho (el argumento quiero decir)

La historia nos traslada a los años 70 y nos presenta a Irving Rosenfeld (Christian Bale) un astuto estafador que junto con su "socia" Sydney Prosser (Amy Adams) acumularan infinidad de exitosos "negocios" hasta que por manos del destino acabaran viéndose obligados por el agente Richie DiMaso (Bradley Cooper) a colaborar con el FBI. DiMaso es un tempestuoso e inestable agente que levanta una lucha personal contra políticos y mafia. Vale hasta aquí todo pintaba muy bien, pues por desgracia poco partido se le sacó a esta historia.

Por supuesto no todo es negativo, porque a pesar de lo mal resuelto que está este film, he de decir que la actuación de Bale y Cooper son formidables. Así como la de Jennifer Lawrence, que a pesar de su, no extensa participación, todas sus escenas parecen cobrar vida más allá del aburrimiento. Derroche de talento y genialidad sin duda.

Siento no poder decir lo mismo de la otra protagonista femenina, Amy Adams. Se que muchos no estarán de acuerdo conmigo, pero en mi opinión a esta chica, en este papel se la ha sobrevalorado. No transmite, no engancha, el papel le viene grande o sinceramente es que no le viene. Y he de añadir que parece que Rusell se ha empeñado en que todo el mundo se fijara en ella -y no lo digo por los infinitos escotes que muestran más que sugieren- prácticamente no aparta la cámara de ella, y siempre muy encima, muchos primeros planos. Demasiados.

Primeros planos y planos muy cortos. Movimientos de cámara repetidos una y otra vez -de la cara a las manos, de las manos a la cara. "Zoom in" constantes- Asfixia a los personajes con tanto recurrir a esos planos cortos, no hay vida cinematográfica, no hay movimiento natural. Agota. Y es una verdadera pena, porque no podemos disfrutar como es debido de una ambientación y una puesta en escena que parece genial. Sin duda una de las cosas que he echado de menos en cuanto a nominaciones para los oscars de esta película es el "vestuario" y "maquillaje y peluquería". Lo merece mucho más que el resto de categorías a las que esta película ha sido nominada.

Otro punto a favor es la banda sonora. Sin duda intachable, magnifica. Muy bien seleccionada y puesta en relación con la acción.

La película ha resultado ser una estafa muy bien perpetrada por este director de grandes actores, porque lo único que consigue algún magnetismo en esta película es la actuación de algunos de sus actores, los estilismos y una banda sonora que engancha con clásicos himnos setenteros, por lo demás hemos caído como auténticos primos ante las argucias de este trilero hollywoodiense de David O. Rusell.

martes, 4 de febrero de 2014

'IRMA LA DULCE' ¡PERO ESA, ES OTRA HISTORIA!


'Irma la douce' 1963
Director: Billy Wilder
Reparto: Jack Lemmon, Shirley MacLaine, Lou Jacobi, Bruce Yarnell, Herschel Bernardi, James Caan, Hope Holiday, Joan Shawlee...

Después de tanta película novedosa, hoy me apetecía hablaros de una de las mejores comedias que visto nunca. Divertida y alocada, propia del maestro Wilder, esta 'Irma la dulce' que tiene como protagonistas a Jack Lemmon y Shirley Maclaine, pareja que repite bajo su mando después de realizar la también desternillante comedia 'El Apartamento'.


La acción nos sitúa en el barrio francés de "Les Halles" donde el inquebrantable e incorruptible gendarme Néstor Patou (Jack Lemmon) es destinado como premio por su trabajo. Allí conocerá a distintos personajes propios del barrio, entre los que se encuentra Irma (Shirley Maclaine) una popular prostituta de la que se enamorará perdidamente. A partir de ese momento la vida de Patou cambiará para siempre cuando deja su trabajo y se enfrenta al "chulo" que extorsiona a Irma; un golpe de suerte lo convierte en el nuevo matón de tan pintoresco barrio. Muy a su pesar, empieza a vivir de la chica, a lo que de alguna manera intenta poner remedio. Ella lo considera su protector y él por amor hará lo que sea.

Comedia romántica. Comedia de enredo. Comedia al fin y al cabo. En ella encontramos un sin fin de recursos propios del gran Wilder, como un argumento simple pero que con el transcurso del tiempo se va desglosando en complejas y aberrantes situaciones que envuelven a los personajes en unas increíbles, pero siempre divertidas y satisfactorias -para el espectador- situaciones. Enredos varios, un malentendido tras otro que parece no encontrar solución, invención de personajes que provocan la necesidad de un disfraz. Personajes de lo más rocambolescos, como es el caso de Moustache, el camarero que fue economista, tocólogo, filósofo y multitud de profesiones que nos va introduciendo en cada aparición suya, dejándonos
para el recuerdo la frase: "pero esa, es otra historia..." Grandioso.

Wilder sabía como ponernos en situaciones tan surrealistas y a veces complejas, pero con la habilidad de un genio para evitar que el espectador se pierda en el laberinto de sucesos que nos presenta. Manteniendonos así alerta de cada segundo, de cada frame que nuestro ojo capta, para que no nos despistemos en tan frenético ritmo narrativo. 

Destacable sin lugar a dudas un fuera de serie para el género cómico como es Jack Lemmon, que interpreta al sacrificado enamorado. Lo pone en multitud de situaciones a las que por momentos parece imposible que su personaje pueda sobrevivir. Personaje que además de ofrecernos momentos extremadamente divertidos, nos roba el corazón con su ternura y amabilidad ilimitada. 

Memorable también es la arrolladora actuación de una sensual Shirley Maclain, destacada por su siempre personal estilo de prendas verdes, y un carácter fuera de común que hace las delicias de los hombres que la "persiguen". Fabulosa y genial una Maclaine que brilla como ninguna en la comedia como ninguna.


No me dejo atrás al magnifico Lou Jacobi, que interpreta al excéntrico Moustache, dueño del bar-residencia. Y que nos deja grandes momentos y maravillosos monólogos que marcan con diferencia a esta gran comedia.

El uso de una fotografía brillante, muy colorida, y muy definida que nos permite vislumbrar los artificios y realidades de este singular y pintoresco barrio y que da, si es que es posible, mayor calidad a una película que ya de por sí brilla por si sola.
La música sigue y encaja a la perfección con el alocado ritmo de esta extravagante comedia. 

Me quedo con una escena que es inolvidable y que marca  el estilo y carácter de este film, la escena del traslado de las chicas en el furgón policial. Mítica.

En definitiva una película que nos hace pasar un rato genial, a la vez que nos pone un seria critica a la incompetencia de aquellos que tienen la autoridad, la ineficacia a veces que muestra la policía. Critica, y casi condena la explotación, la corrupción, el machismo y el exceso de vanidad entre otras muchas cosas que ya lo dejo a los entregados lectores de este blog que apuesto verán la película y sacarán sus propias conclusiones... Pero esa, es otra historia!


lunes, 3 de febrero de 2014

'EL LOBO DE WALL STREET' SEXO, DROGAS Y... ¡¡¡DINERO!!!


El lobo que  viene dispuesto a hacerse con todo lo que se le ponga por delante, sin atender a las posibles consecuencias de sus incontrolados actos. Una vida de lujo, desenfreno, ambición, egoísmo, arrogancia y multitud de historias rocambolescas que rodeaban la vida de este "genio" de las finanzas. A modo de resumen rápido eso es lo que nos ofrece esta loca comedia de Martin Scorsese, en la que nos presenta la historia real de Jordan Belford, quien con poco más de veinte años se convierte en fundador de una agencia bursátil en la que, la modestia, la humildad y la discreción son conceptos totalmente desconocidos.
Puede que esta no sea la mejor película de Scorsese, sinceramente para mi no lo es, aunque sí me ha parecido muy buena, no supera a otras obras anteriores infinitamente mejores -no menciono ninguna porque las comparaciones son odiosas y no quiero hacer ese tipo de valoración ahora- aunque como digo eso no quita que sea una gran película.

No deja indiferente al espectador, y desde luego no trata de hacer un juicio de valor sobre la desaforada vida de aquellos que pueblan el distrito financiero más famoso del mundo. Eso de valorar lo deja para los que nos sentamos frente a la pantalla a observar una visión muy particular de ese mundo loco de poder y ambición.

Scorsese dirige a un Leonardo DiCaprio fuera de serie, brillante, soberbio, excelente y que, tal vez ahora sí llegue la ansiada recompensa en forma de estatuilla dorada que responde al nombre de Oscar. Desde el minuto uno, hasta el final, DiCaprio lleva el peso de toda la acción. Y lo hace de una manera extraordinaria. Incluso cuando hace los apartes hablando directamente al espectador, ofreciendo así una idea más de documental que de simple película, dejamos de ver al actor para ver simplemente al personaje, a Jordan Belford y sus increíbles y desbordantes peripecias.

Una larga comedia -son tres horas de metraje- en la que el ritmo no decae y cuando lo hace, lo hace justo para darnos un respiro para la siguiente subida. Presenciamos lo grotesco, lo exagerado, lo irreverente y casi lo surrealista, pero nada de esto maquilla un efectismo puesto a propósito para deleitar al espectador. Las risas están garantizadas y, a pesar de todo esto, y de la superficialidad que en todo momento nos muestra, no se deja de lado la humanidad de los personajes a los que en los momentos más duros la sensibilidad y el sentimiento afloran sin restricciones, otorgando así a esta película el alma que parece no tener.

domingo, 2 de febrero de 2014

'AGOSTO': LA TENSA Y DENSA UNION FAMILIAR


Comedia dramática es el género en el que se encuadra esta película, y os aseguro que tiene drama de sobra, y momentos cómicos también de sobra... Incluso me aventuro a decir, que muchos de los dramáticos momentos, son de lo más cómico. Sin lugar a dudas me decanto por esta película para dejarla en mi cajón de favoritas.

La película nos presenta a la familia Weston, una familia, por decirlo de alguna manera fuera de lo común. Complejidad máxima en todos y cada uno de sus miembros. Una madre, magistralmente interpretada por Meryl Streep, enferma de cáncer, alcohólica, drogadicta, fumadora empedernida y poseedora de una viperina lengua que lanza dardos extremadamente envenenados y que rara vez fallan el blanco fijado. Verá a su familia reunida de nuevo con motivo del fallecimiento de su marido. Sus tres hijas, a las que dan vida Julia Roberts, Juliet Lewis y Julianne Nicholson, protagonistas de desastrosas vidas sentimentales van concentrar la mayor parte de los distintos conflictos que se abrirán con motivo de dicha reunión. Una de las cosas que parece sacamos en conclusión es que esta familia esta condenada a la infelicidad, a la soledad y que el asfixiante calor de Agosto no ayuda a suavizar la ya gravemente desgastada relación familiar.

El guión sin lugar a dudas es buenísimo, diálogos extraordinarios, de esos que si lo piensas son más reales de lo que parecen. Y es que el guión de alguna manera puede parecer sacado de una realidad que a veces no queremos ver. Tengo que hacer énfasis en la escena de la cena, no quiero contar mucho para no revelar nada, pero la tensión, y agobio que se vive en esa pequeña sala, con todos llevando la discusión según su punto de vista es fenomenal.

En cuanto a referencia a actoral, qué queréis que os diga, el reparto es excelente. Trabajo genial por parte de todos, muy destacables Chris Cooper, Julianne Nicholson, Benedict Cumberbatch y Julia Roberts. No defraudan en su papel y desde luego aportan gran vida y personalidad a sus personajes. Pero si hay alguien que destaca muy por encima es Meryl Streep. No se cuando esta mujer va a bajar el listón, y para el resto de compañeros de reparto debe ser muy frustrante ver en pantalla como su personaje prácticamente se come al resto.

Violet, el personaje de Streep, es una madre terrible, insoportable, desagradable... un sin fin de, ningún buen adjetivo, que nos hace ponernos en la piel de una saturada y angustiada Julia Roberts, harta de los desagravios de esta aparente incombustible madre.

A pesar del gran trabajo de los actores, la labor de dirección de John Wells es algo floja para mi gusto. Personalmente recurre en exceso a primeros planos, y planos cortos para provocar en el espectador esa sensación de asfixia que viven los personajes. La situación y la carga de emociones creo que son más que suficientes, no era necesario enfatizar tanto con "trucos de cámara".

Sea como fuere, la película rompe con la idea de la perfecta familia americana. Rompe con los tópicos. Y destroza conceptos tan evidentes como el amor fraterno. No existe el consuelo y la alegría de reunión familiar. Y todo ello nos lo ofrece con un agudizado e hiriente sarcasmo que escuece como una herida abierta que tarda en cerrar. Este retrato de las relaciones familiares nos abre los ojos ante como a veces son de tensas y densas las uniones familiares.